Además de sake y cerveza, sí, Japón es un gran productor de vinos. En esta nota te cuento sobre sus vinos blancos más famosos y, aunque parezca raro, sus más de 100 años de historia vitivinícola.
130 millones de habitantes en una isla chiquita que es de las potencias mundiales… y, aunque les suene raro, también produce vino. De hecho, su apuesta fuerte en los últimos años se concentra en una pequeña uva rosada: la llaman Koshu y sobre ella también te voy a contar.
En Japón hay historia
De verdad que sí, eh, aunque los orígenes del vino en Japón son algo confusos. La historia moderna dice que la “revolución vitivinícola” (si es que el título no queda demasiado generoso) se comenzó a notar a finales del siglo XIX, acompañando a la Restauración Meiji que provocó famosas modificaciones políticas y culturales.
Ese crecimiento económico elevó los niveles de vida e hizo que, entre otras cosas, se disparase el consumo de vino en un costado algo sofisticado. Y por eso también la producción local despegó y, con esto, esta cepa autóctona de la que te quiero hablar.
Koshu, una esperanza blanca
Ése es el nombre que lleva la uva autóctona más importante de Japón. Es un racimo de apariencia rosada, aunque con ella se elaboran vinos blancos, y que está viviendo un interesante momento de desarrollo.
Confieso que nunca he probado uno, porque tampoco son vinos tan simples de conseguir en el mercado internacional (y, cuando estuve una única vez en Japón, no eran tiempos míos de vino, sabrán entender). Pero quienes sí lo han bebido dicen que son blancos especiados, de alcoholes bajos y estructura liviana.
Ojo, también hay que tener en cuenta el clima de Japón, súper influenciado por el agua, la humedad alta y lluvias intensas (que se suman a veranos de más de 30 grados, todo un tema).
Los números de los vinos de Japón
De las cerca de 100.000 hectáreas de viñedos en el país, se estima que solamente un 20% de ellas se destina a la elaboración de vino (el restante 80% es para uvas consumidas en fresco). Porque, también hay que decirlo, en Japón se beben unos 3 litros anuales per cápita, un número pequeño a pesar de que sean muchos habitantes.
A nivel productivo, cuando uno ve el mapa encuentra que se produce vino en casi todo el país pero, como para que tengan una idea, en Yamanashi Prefecture (la región vitícola más importante del país, cercana al Monte Fuji) hay 80 bodegas con un promedio de 1 hectárea cada una.
El total de productores es de poco más de 200.
Vinos de Japón, ¿qué tal? Voy a ver si me pongo en campaña para beber algo y luego te cuento.