El frío lo amerita y, como en el post anterior buceamos por los maridajes de invierno, hoy vamos a seguir por ese camino. Ideas para calmar las temperaturas de estos días, con recomendaciones de cervezas argentinas y del mundo perfectas para subir unos grados.
Ya lo hablamos: el mercado de las cervezas se ha ampliado hasta el infinito y nos permite que, en la góndola, encontremos algunos buenos estilos perfectos para la temporada. Alcoholes altos, complejas en nariz y con potencial de guarda, acá te tiro algunos nombres útiles para que anotes y pensemos para maridajes de invierno.
Imperial Stout // Las versiones más fuertes de esta cerveza oscura trepan hasta el 13% de alcohol. Aromas tostados a café y chocolate son los perfiles más encontrados y, además, por su intensidad son estilos que quedan perfectos cuando se los madura en roble.
Un bueno ejemplo local embotellado es la Berlina Foreing Stout, aunque en los bares multimarcas también podés conseguir muy lindas cosas en barril, como la Apocalipsis de Kraken y la Imperial de Nihilista.
Barley Wine // Súper complejas, las versiones inglesas tienen un leve balance hacia el dulzor de las maltas, mientras que en las americanas son los aromas a lúpulo los que dominan. Lo ideal es tomarlas a una temperatura de 13°C, más alta que lo normal.
Un bueno ejemplo local (y pionera en el estilo) es la Antares Barley Wine. Nuevo Origen está haciendo una llamada Génesis criada en huevos de cemento, así que atentos.
Doppelbock y Eisbock // Son lagers muy limpias, con aromas a malta, frutos secos y leves toques de caramelo. Arrancan alrededor del 8% de alcohol y, las versiones más fuertes, llegan hasta el 18%. Las Eisbocks son doppelbocks que se congelan y se les extrae parte del hielo, obteniendo mayor contenido alcohólico y aromas y sabores más concentrados.
En el supermercado podés conseguir la Paulaner Salvator, un clásico mundial, y, aunque difícil, otra recomendada es la Doppelbock Malbec de Juguetes Perdidos.
Belgian Dark Strong Ale // También conocidas como Quadruppel, éstas son las versiones oscuras más fuertes de las cervezas belgas. Azúcar quemado, frutos secos y pasas son todas notas que se suman a las levaduras belgas y sus típicos aromas especiados. A pesar de tener alrededor de 10% de alcohol son muy fáciles de tomar debido al alto contenido de azúcar que se le agrega en la receta, aumentando el contenido alcohólico sin agregar cuerpo.
¿Recomendadas? La Chimay Bleue y la La Trappe Quadrupel.