Cristina Mariani-May es la propietaria y co-CEO de Castello Banfi, bodega ícono de Montalcino, Italia, y, por ende, de todo el mundo. Acá conversamos con ella sobre el mercado, la competencia y la difícil tarea de mantener una tradición.
Cristina Mariani-May es la propietaria y co-CEO de Castello Banfi, un icono de Montalcino. Esta empresa es colosal y, a su vez, se ha ganado una merecidísima fama que sus vinos supieron respaldar cosecha tras cosecha, ya desde hace cientos de años. Cristina es una de las propietarias de la bodega que todavía hoy está en manos de la misma familia que la vio nacer. Esa misma familia que cada año logra mantener sus tradiciones intactas sin resignar calidad a pesar de producir botellas de a miles.
¿Cómo describiría lo que el Brunello significa para usted y su familia?
En una palabra, Brunello es Montalcino. Los dos son inseparables en cualquier sentido, unidos en un carácter único, ambos como un terruño y como una comunidad de personas. En un nivel más personal, Brunello simboliza para mí uno de los grandes patrimonios de Italia y algo en lo que mi familia trabajó, junto a la comunidad, para construir su verdadero y extraordinario potencial.
Banfi es uno de los mayores productores de la zona. ¿Cómo manejan la puja de poder entre la cantidad y la calidad?
Es que si tú estás bien organizado para producir cantidad pero lo haces con mentalidad de artesano, puedes crear vinos verdaderamente grandes en cantidades razonables. Somos una gran familia, pero seguimos siendo una familia y hacemos nuestros vinos de esa manera.
Volviendo a Banfi, la bodega tiene la particularidad de ser una de las casas vitivinícolas más tradicionales de Montalcino pero que, a su vez, siempre se ha mantenido a la vanguardia. ¿Está usted de acuerdo con esto?
Nosotros nunca nos dormimos en los laureles. Seguimos estudiando, desarrollando, aprendiendo y mejorando. Un hombre sabio una vez me dijo que la tradición no es más que una innovación exitosa.
Viviendo en New York imagino que tiene la magnífica oportunidad de degustar vinos de todo el mundo. ¿Qué cosas encuentra en ellos que no hay en los Brunello?
Creo que los mejores vinos del Nuevo Mundo tienen un sentido de lugar, como el Brunello, pero en general tienden a tener una opulencia y carácter afrutado que no es común en los vinos europeos.
¿Y cómo es la otra mirada? ¿Qué tiene el Brunello que lo distingue de todos los otros vinos del mundo?
Como te contaba, los Brunello tienen un sentido muy marcado del lugar, al igual que también los del Nuevo Mundo. La única generalización que podría hacer es que el Brunello (y los vinos del Viejo Mundo en general) suelen tener una vena de acidez que los hace excepcionales para acompañar un plato, por ejemplo.
Finalmente, ¿cómo hace para trabajar en Banfi viviendo en New York?
Mira, yo tengo la suerte de ser ciudadana del siglo XXI, donde la tecnología convirtió a la comunicación tradicional en una completamente instantánea. Además, tengo una familia maravillosa que me permite viajar a Italia muy a menudo y, claro, un gran equipo del que puedo depender cuando yo no estoy en persona.
2 comentarios
Prove por primera vez un Brunello de Montalcino en un buen Restaurante de la ciudad de Pisa con mis hijas Erikita (15) y Pierina (8)…era el año 2000…desde ese momento es mi vino preferido y el que más recomiendo…siempre de la Cantina Banfi !
¡Qué grande, qué linda experiencia!